La imagen podría corresponder a cualquier ciudad de principios del siglo pasado en una ciudad cualquiera.
Es posible que las personas que padecían cualquier trastorno mental estuvieran a buen recaudo para no perturbar la tranquilidad de esa calle y de paso esconder la fealdad de lo distinto y desagradable para los que vivían en dicha comunidad, aunque también hubiera otras que de una forma u otra, investigando, probando este o aquel método intentaran corregir "esa anomalía" que perturbaba la buena convivencia entre sus vecinos. Ensayo y error.
Me resulta fácil escribir de algo que por suerte desconocí pero si me acuerdo de los que quedaron por el camino y me viene la imagen de sitios lúgubres, sin lo más mínimo para que una persona pudiera vivir con su enfermedad; aislado del resto y si no era peligroso lo habrían juntado con los de su misma condición.
Dando un salto en el tiempo, de unos ciento y pico años, se sigue segregando lo que no nos gusta, lo que no encaja en nuestra forma de vida, lo que ralentiza, lo que exigen los nuevos tiempos: resultados que beneficien a la mayoria y sacando por la puerta de atrás lo que no "sirve".
Por lo que yo ví cuando trabajé en esa fundación podría señalar que prácticas o cuales no, insisto, según mi criterio como cuidador, creía eran adecuadas para las personas a las que le dábamos, alojamiento, manutención y si era posible una forma de ganarse la vida, para salir del bucle en el que se había convertido su vida por padecer una enfermedad mental.
Afortunadamente ya no es mi guerra, me señalaron dónde estaba la puerta y yo acepté la invatación. "Hasta luego, Lucas". Fue mi salida.
Las formas para mí, no fueron las correctas, pero mi visión es distinta, afortunadamente para mi salud; como he dicho en otras entradas tuve un infarto mientras trataba de hacer mi trabajo y a asistí como testigo a la muerte de algunos para los que trabajamos en aquella época.
Cómo traté de explicarle a la directora de entonces no todo valía para llevar a cabo nuestro trabajo en aquella ONG. Conmigo, amenazas las minimas si está en juego la salud de las personas.
Comentarios